25 Abr 5 indicios de que tu negocio necesita una transformación empresarial

Por Gonzalo Cruz, copywriter de Timpulsa

A menudo nos encontramos con empresas, tanto pymes familiares como empresas más grandes, que no saben exactamente como afrontar los problemas que encuentran en su negocio. Tampoco saben a quien acudir para subsanarlos o de que manera hacerlo. Hoy te mostramos los indicios básicos que sugieren que necesitas darle un nuevo giro a tu empresa, y te mostramos cómo podrás lograrlo.

SEÑALES DE PROBLEMAS ELEMENTALES EN TU EMPRESA

1. Confundir marketing con estrategia empresarial: comunicar de forma clara y concisa a nuestro mercado es una parte de la estrategia empresarial que debemos seguir, pero no es una estrategia exclusiva. El marketing siempre es clave para mostrar al público lo que ofrecemos y para ayudar al cliente a elegir nuestros productos. Sin embargo, realizar una buena puesta en escena y tener unos buenos canales de comunicación no son lo único en lo que nos tenemos que centrar para llevar nuestra empresa a buen puerto. Debemos tener algo claro antes de nada: sin un buen producto, no hay marketing que valga. Para ello debemos disponer de una clara estrategia integral que nos ayude a diferenciarnos de la competencia con un gran compendio de actividades adyacentes, además del marketing.

2. La idea de que tener una ventaja competitiva es suficiente: en ocasiones nos encontramos en situación de superioridad en ciertos aspectos frente a nuestra competencia, pero no debemos basarnos en esto para pensar que ya no necesitamos realizar ninguna acción más. Es decir, podemos llegar a la conclusión fácilmente de que, al encontrarnos con ciertas fortalezas positivas que nos sitúan en una buena posición debemos olvidarnos de nuestras debilidades, bien sea porque las vemos menos importantes o porque creemos que no somos vulnerables en ese ámbito. Esto es un arma de doble filo; debemos conseguir una fortaleza integral adecuada a nuestra situación empresarial. Podemos estar dejando pasar algo que sea más importante para el consumidor de lo que nosotros creemos, y nuestra competencia puede superarnos.

3. Pensar que el tamaño es importante: A veces tenemos la idea de que solo algo que es grande nos va a resultar rentable pero esto no es siempre así. Es un gran error pensar que el tamaño de nuestra empresa será suficiente para encontrarnos con el éxito, pero estaremos ante un error. No hay que remontarse demasiado para observar cómo grandes e históricas empresas han caído frente a esta idea y en el otro extremo cómo empresas neonatas han conseguido situarse a la vanguardia del mercado mundial en sus sectores. Debemos trabajar continuamente en un modelo de negocio diferenciador e innovador que nos sitúe en un punto privilegiado, y no confiarnos solo porque nuestra empresa sea grande o, al contrario, pensar que por ser una empresa pequeña hemos de tener un mercado muy reducido.

4. Pensar que la única estrategia es crecer: solemos asociar el crecimiento a la facturación. Pero podemos multiplicar ésta de diversas maneras, como por ejemplo añadiendo de forma paralela más maquinaria junto con más personal, pero sin aplicar ninguna estrategia adicional. Esto puede resultar absolutamente perjudicial para la continuidad de nuestra empresa. Sacrificamos el medio y largo plazo por beneficio a corto plazo (algo que ha estado muy presente en las empresas españolas durante mucho tiempo), y pensamos que es la estrategia correcta, pero no es así. Debemos ser conscientes de que nuestra empresa no solo ha de funcionar con vistas a un futuro cercano sino que hemos de crecer a lo largo de toda nuestra vida empresarial. Este pensamiento es una piedra en nuestro camino que bien podríamos evitar.

5. Creer que la verdadera estrategia está en vender en mercados de alto crecimiento: podemos llegar a pensar que el dinero solo se encuentra en mercados que están actualmente en alza, pero nada más lejos de la realidad. Es obvio que una gran parte del negocio podría encontrarse en ellos, pero no nos podemos basar solo en esto para invertir. En mercados estancados como el del café, donde han desaparecido varias empresas y la rentabilidad es claramente limitada, se están introduciendo nuevas estrategias como respuesta de adaptación al mercado, que están devolviendo la rentabilidad a este sector. Sin embargo, en otros mercados que tienen apariencia de continuo crecimiento nos podemos encontrar más tarde con otra realidad mucho más siniestra; un claro ejemplo de esto serían las inmobiliarias en España a mediados de la pasada década, que parecían un negocio rentable, claro, y sin apenas barreras de entrada.

Todos estos problemas y muchos más son perfectamente subsanables, pero la clave consiste en saber como hacerlo y matizar la idea que tenemos del problema para avanzar hacia una solución. En Innovanza Asesores, gracias a nuestra alianza con Timpulsa, analizaremos y asesoraremos tu negocio para mejorar tus estrategias y realizar una transformación integral segmentada en fases para tu empresa, para conseguir de esta forma situarla entre los primeros puestos de su sector.